No podemos cambiar el pasado
Podemos reprochar a nuestros padres por todo lo que “hicieron mal”. El reproche o resentimiento que tenemos hacia nuestros padres es el mismo reproche que después le hacemos a nuestra pareja y el resentimiento que nos queda hacia la vida.
Ver a nuestros padres desde el amor, desde la conciencia entendiendo que ellos son dos almas en evolución y aprendizaje igual que nosotros, que nos dieron lo que pudieron, sin reprochar por lo que a nosotros nos hubiera gustado que fueran.
Al honrar a nuestros padres tal como son o fueron honramos la vida que ellos nos dieron, ubicandonos en un lugar de adultos.
Al seguir reclamando por lo que no nos dieron, estaríamos en una postura infantil.
Está en cada uno salir del lugar de reclamo infantil y moverte a una postura de adulto. No podemos cambiar el pasado, podemos cambiar el presente, por eso si no te gusta donde estás, generá un cambio, de movete de ese lugar que ya no te gusta, creá la vida que realmente querés tener.
Este es un tema recurrente dentro de mis posteos, tomar a nuestros padres tal cual fueron, sin agregarles ni sacarles nada, como fueron, nos une con nuestra vida, nos da fuerza, tomamos la fuerza de ellos.
Es sumamente importante realizar este trabajo interno, “reconciliarnos” internamente con nuestros padres, aunque hoy no estén es reconciliarnos con nuestra vida.
Si queréis hacer un proceso de terapias holísticas complementarias te puedo acompañar.
Renée Tenaglia